/LD
El curso se realizará en el hotel Viva Wyndham Tangerine de Cabarete, Puerto Plata, en coordinación con varias instituciones locales.
Participarán miembros dela Defensa Civil y personas relacionadas con la hotelería en la zona norte, pero ISLA informa que tiene disponible otros 10 puestos.
El curso está dirigido a personas mayores de 18 años en buenas condiciones físicas con capacidad para nadar 300 metros en aguas abiertas sin parar, que puedan mantenerse flotando por 5 minutos, nadar 5 metros bajo el agua sin respirar y sumergirse a una profundidad de 3 metros.
Isla trabaja desde 2008 “para reducir la tasa de ahogamiento mundial proporcionando recursos para programas educativos oceánicos, y enviando salvavidas voluntarios a regiones diversas para ayudar con la necesidad pública de rescate acuático y respuesta médica”.
El curso es coordinado en el país por William Koon, del Proyecto de Salvavidas Dominicanos de ISLA. Koon asegura que la necesidad de salvavidas en el país es crítica, y que urge crear conciencia acerca de la importancia de la seguridad acuática.
Los interesados pueden escribirle a william.koon@islasurf.Org
INTERÉS EN FOMENTAR UNA CULTURA DEL AGUA
ISLA tiene interés en crear relaciones con instituciones dominicanas que quisieran colaborar en la capacitación de salvavidas y en motivar en la gente el interés por el agua.
Para la próxima Semana Santa, un grupo de voluntarios de la asociación en Estados Unidos se integrará a las labores de prevención y trabajo en las playas dominicanas junto a los salvavidas locales entrenados en el curso.
La asociación ha trabajado en Nicaragua, Ecuador, Nueva Zelanda y México y recién han iniciado en Japón y Chile.
Interesados en colaborar en la capacitación de salvavidas profesionales y personal de rescate en República Dominicana, un equipo de instructores de la Asociación Internacional de Salvamento de Olas (ISLA, en inglés) se encuentra en el país para impartir del 25 al 27 de noviembre un curso de entrenamiento sobre salvamento en aguas abiertas.
“Los dominicanos viven en una isla y dependen mucho de las actividades acuáticas, pero no tienen una cultura del agua, por eso es necesario tener salvavidas profesionales, para salvar, proteger a la gente y mantener la seguridad en las playas”, consideran Henry Reyes, Morgan McGowan y Julia Sánchez, director y miembros, respectivamente, de la asociación con sede en California, Estados Unidos.
El curso se realizará en el hotel Viva Wyndham Tangerine de Cabarete, Puerto Plata, en coordinación con varias instituciones locales.
Participarán miembros dela Defensa Civil y personas relacionadas con la hotelería en la zona norte, pero ISLA informa que tiene disponible otros 10 puestos.
El curso está dirigido a personas mayores de 18 años en buenas condiciones físicas con capacidad para nadar 300 metros en aguas abiertas sin parar, que puedan mantenerse flotando por 5 minutos, nadar 5 metros bajo el agua sin respirar y sumergirse a una profundidad de 3 metros.
Isla trabaja desde 2008 “para reducir la tasa de ahogamiento mundial proporcionando recursos para programas educativos oceánicos, y enviando salvavidas voluntarios a regiones diversas para ayudar con la necesidad pública de rescate acuático y respuesta médica”.
El curso es coordinado en el país por William Koon, del Proyecto de Salvavidas Dominicanos de ISLA. Koon asegura que la necesidad de salvavidas en el país es crítica, y que urge crear conciencia acerca de la importancia de la seguridad acuática.
Los interesados pueden escribirle a william.koon@islasurf.Org
INTERÉS EN FOMENTAR UNA CULTURA DEL AGUA
ISLA tiene interés en crear relaciones con instituciones dominicanas que quisieran colaborar en la capacitación de salvavidas y en motivar en la gente el interés por el agua.
Para la próxima Semana Santa, un grupo de voluntarios de la asociación en Estados Unidos se integrará a las labores de prevención y trabajo en las playas dominicanas junto a los salvavidas locales entrenados en el curso.
La asociación ha trabajado en Nicaragua, Ecuador, Nueva Zelanda y México y recién han iniciado en Japón y Chile.
Comentarios