El mes de diciembre está cargado de muchas fiestas y celebraciones, a tal punto que se le ha considerado el viernes de los meses. La gastronomía dominicana para esta época es muy peculiar, en las mesas de los hogares no faltan el moro de gandules, la ensalada de papas o rusa, los pasteles en hoja y sobre todo el cerdo o puerco asado en puya. En nuestros campos era común (hoy no tanto) ver amanecer del 23 al 24 de diciembre a grupos de familias asando el puerco de Nochebuena, de ahí que muchos usaran otros componentes del cerdo para cocinar durante la noche del 23 y como el clima para la época es muy agradable que mejor que un sancocho mientras se asaba el cerdo.
De ahí nace la tradición de una familia Puertoplateña que lleva 29 años de manera ininterrumpida realizando cada 23 de diciembre un Sancocho Prieto como preámbulo de la Cena de Nochebuena, hubo años en los que sí se asaba el puerco en el patio de la casa mientras se disfrutaba en familia degustando el tradicional plato dominicano pero en los últimos años aunque no se asé el cerdo en la casa, la tradición sigue vigente y es una cita obligada en el hogar de la familia Silverio – Balbuena disfrutar del sancocho del 23 de diciembre.
Anoche una vez más disfrutamos en familia, con el ingrediente especial de celebrar su primer añito de vida de nuestro sobrino Jabriel, donde junto a los más jovencitos y no tan jóvenes disfrutamos del Sancocho Prieto numero 29. Deseándole que el Señor derrame abundante bendiciones, prosperidad y salud sobre cada uno de los miembros de esta maravillosa familia. Esperando encontrarnos una vez más el próximo año.
De ahí nace la tradición de una familia Puertoplateña que lleva 29 años de manera ininterrumpida realizando cada 23 de diciembre un Sancocho Prieto como preámbulo de la Cena de Nochebuena, hubo años en los que sí se asaba el puerco en el patio de la casa mientras se disfrutaba en familia degustando el tradicional plato dominicano pero en los últimos años aunque no se asé el cerdo en la casa, la tradición sigue vigente y es una cita obligada en el hogar de la familia Silverio – Balbuena disfrutar del sancocho del 23 de diciembre.
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