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El Pabellón de la Fama del Deporte Dominicana abrirá sus puertas el domingo 16 de octubre a una de las grandes luminarias que tuvo la época dorada del béisbol amateur.
Se trata de Enrique Cruz Collado, mejor conocido en el mundo deportivo como Quique Cruz, quien será exaltado a la inmortalidad deportiva en el XLV Ceremonial que tendrá efecto el tercer domingo de octubre en el Aula Magna de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) a partir de las 11.00 de la mañana.
El sueño anhelado de todo atleta que a lo largo de su carrera deportiva y ciudadana se ha destacado de manera extraordinaria por sus triunfos y hazañas deportiva logradas tanto en torneos nacionales como en eventos y campeonatos internacionales por su conducta ciudadana, se verá materializado en la persona del destacado beisbolista aficionado Quique Cruz, quien tuvo la gloria de conectar el cuadrangular decisivo para dejar en el terreno a la selección de los Estados Unidos en la disputa por la medalla de plata en los Juegos Panamericanos de 1979, y fuera pieza esencial para que República Dominicana ganara el oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe celebrados en La Habana, Cuba, en 1982.
Scheker Ortiz, al ponderar losméritos del nuevo inmortal del deporte dominicano, destacó que el Comité Permanente tuvo en cuenta la durabilidad de este brillante jugador que permaneció por 25 años en el amauteurismo jugando para diversos equipos locales y representando a la República Dominicana en múltiples torneos y competencias internacionales, teniendo siempre una muy destacada actuación.
Cruz, de 60 años, nació en Imbert, Puerto Plata, el 15 de julio de 1951 y desde su infancia tuvo una marcada vocación por el deporte, y su preferencia hacia el béisbol, disciplina en la que dice que tuvo como grandes soportes a sus padres Severiano y Lidia, y a Wenceslao -Laíto- Tejeda, quien le tomó de la mano apenas llegó a la capital en 1970 al observar sus magníficas condiciones, luego de haber descollado en su ciudad natal, Puerto Plata y en torneos provinciales.
En Santo Domingo comenzó a destacarse participando en los equipos Colgate, Ingenio Ozama, Monte Carlo, Maprica, Baterías Meteoro y con el de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, siendo en 13 ocasiones miembro de los equipos campeones Colgate, Maprica y Meteoro y UASD.
En seis de esas campañas fue líder de jonrones y por siete ocasiones encabezó el departamento de carreras remolcadas. Además, en varias ocasiones fue escogido como parte del equipo “Todos Estrellas” como jardinero. Su mejor año en el plano nacional fue el 1979 cuando disparó 11 cuadrangulares y empujó 46 carreras, para de esa forma darle el campeonato al Maprica. Otro de sus mejores momentos en el béisbol local fue en 1977 cuando la UASD le ganó el Cívico-Militar a la Policía Nacional, quedando Cruz como líder de los bateadores.
En el plano internacional, Quique Cruz inició su participación en el 1975 asistiendo a los Juegos Universitarios de México con la Universidad Autónoma de Santo Domingo. A partir de entonces representó el país en tres versiones de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, dos Juegos Panamericanos, un Mundial de Béisbol, tres Mundiales Universitarios y en cuatro Copas Invitacionales de la región.
Entre sus logros como selección nacional están la medalla de oro en los Juegos Universitarios Santo Dominico ‘77, Plata en los Juegos Panamericanos de Puerto Rico ‘79, oro en los Centroamericanos y del Caribe de’ 82 en La Habana, Cuba; plata en los Universitarios de Guatemala ’90 y oro en los Juegos Invitacionales de ese mismo año.
Su mejor actuación internacional fue en el 1979, en los Panamericanos de Puerto Rico, cuando decidió tres encuentros de los seis que ganó República Dominicana. Por su actuación colectiva fue escogido en el equipo “Todos Estrellas” como primera base.
Señala que su momento más emocionante fue cuando conectó el jonrón contra Estados Unidos en el noveno episodio para dejarlo en el terreno que le dio la victoria 2-0 y la obtención de la medalla de plata a la República Dominicana en los Panamericanos del 79.
También, cuando Dominicana ganó la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos de Cuba. Cruz cuando pegó tres jonrones en un partido del torneo de béisbol de los Juegos Centroamericanos y del Caribe del 78 celebrados en Medellín, Colombia. En el 81 fue nombrado por la Asociación de Cronistas Deportivos como “Atleta del Año”.
En el 1979 contrajo matrimonio con Elvira Rodríguez Clase, quien era receptora de la Selección Nacional de Softbol, procreando cuatro hijos: Carolina Cruz, Claudia, Elvis y Enrique Cruz Jr, quienes jugaron béisbol profesional con los Marineros de Seattle y los Metros de Nueva York, respectivamente.
Paralelamente a toda esa actividad, el 25 de enero de 1985, Quique y su esposa fundaron la Liga Deportiva Enrique Cruz, la cual desempeña un papel preponderante en el desarrollo y formación integral en valores éticos y educativos de disciplina, esfuerzo, y compañerismo de los jóvenes que practican esa disciplina, dándole a la sociedad ejemplo como sus propios hijos Elvis y Cruz Jr., y José Bautista, Ricardo Nanita, Julio Borbón profesionales del béisbol que se formaron en la Liga Quique Cruz, así como grandes profesionales que hoy en día ocupan posiciones gerenciales en reconocidas empresas.
La Liga ha sido una entidad que ha venido a hacer realidad los sueños de muchos niños, jóvenes, padres y de toda la familia, con los diversos torneos y viajes internacionales, los cuales a través de los años han sido la base de una mayor integración familiar y el crecimiento de la misma añadiendo sanas y duraderas amistades.
Veinte años dando su corazón en competencias nacionales e internacionales para poner el nombre del país en el pedestal más alto sin exigir nada a cambio; más 25 años dedicado a la formación de jóvenes talentos para el béisbol profesional, universitario y recreativo hacen de Enrique -Quique- Cruz una gloria del deporte nacional.
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