Existen muchas formas de medir el desarrollo de una nación, en la actualidad ronda cierta discusión con lo referente al crecimiento económico y el desarrollo humano de un país, se piensa que uno conlleva al otro pero vemos que en la realidad esto no es así. El principal indicador de crecimiento económico de un país es el aumento del arcaico PIB, en tanto que para medir el desarrollo humano de una nación hay una serie de factores a tomar en cuenta como son: vida larga y saludable (medida según la esperanza de vida al nacer), educación (medida por la tasa de alfabetización de adultos y la tasa bruta combinada de matriculación en educación primaria, secundaria y superior, así como los años de duración de la educación obligatoria), nivel de vida digno (medido por el PIB per cápita en Paridad de Poder Adaquisitivo en dólares). 
El termino país en vías de desarrollo se refiere principalmente al grado de desarrollo económico, lo que no necesariamente se asocia al desarrollo social, en términos de educación, salud o esperanza de vida. La República Dominicana ha tenido el mayor crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) entre las naciones de América Latina y El Caribe, desde 1961 hasta el 2005. Sin embargo, está entre los países que menor crecimiento del desarrollo humano ha tenido en ese mismo período. Por lo que nuestro país ha experimentado un crecimiento económico que no se ha visto correlacionado con el desarrollo humano, ya que existió un incremento de la desigualdad, la pobreza y el desempleo, nuestro país es un buen ejemplo de todo lo antes planteado. La forma irresponsable e ineficiente de la distribución de los ingresos que obtiene el Estado dominicano, por concepto del cobro de impuestos, lejos de incentivar el desarrollo humano constituye una máquina multiplicadora de pobreza. El ejemplo más real de esto es que antes los aborígenes buscaban el agua en higüeros, 500 años después se cargan en cubetas plásticas, cuánto se ha avanzado.
Comentarios